domingo, 10 de octubre de 2010

La demencia de una cantante

Sus inicios fueron de magia y peligro, pero la conocimos cuando tenía los pies descalzos y sueños blancos construidos perfectamente para lograr una antología, luego se volvió bruta, ciega sordomuda que le aseguraro un éxito inevitable, con los ojos así hizo vibrar al mundo donde estaban los ladrones. Después de un gran descanso decidió desearse suerte y subió a los andes para regalarnos un tango que le hizo vivir una tortura de amor, para luego afirmar que sus caderas no mentían cosa que era muy cierta, tanto así que termino transformándose en una loba errónea, admitiendo que lo hecho esta hecho decidió remediarlo con un waka, waka; pero no le resulto y no le quedo más que la demencia popular, para así lograr vender discos como una loca.

Después de esta delatadora introducción, no hay duda del personaje a cual se refiere esta entrada, no es que tenga una disputa contra la cantante, pero es que no creo que para nadie sea un secreto que el nuevo sencillo que forma parte del último disco de la cantautora “Sale el sol”, es totalmente un desastre, no existe una armonía entre la letra y la música, a decir verdad la seuda composición no es más que un sinfín de frases conectadas sin algún sentido ni coherencia artística que tanto hacían alardes de la Colombiana que no ha hecho más que robar títulos y frases de canciones pasadas por lo menos de este lado del continente (no digo que plagie canciones). Sin ánimos de no perder tiempo en hacer comentarios de lo que ya sabemos que no le funciona, me despido dejándole la letra de la canción que lleva el mismo nombre del álbum, la cual está dedicada a Cerati.

“Sale El Sol”

Estas semanas sin verte
Me parecieron años
Tanto te quise besar
Que me duelen los labios
Mira que el miedo nos hizo
Cometer estupideces
Nos dejó sordos y ciegos
Tantas veces

Y un día después de la tormenta
Cuando menos piensas sale el sol
De tanto sumar pierdes la cuenta
Porque uno y uno no siempre son dos
Cuando menos piensas sale el sol.

Te lloré hasta el extremo
De lo que era posible
Cuando creía que era invencible
No hay mal que dure cien años
Ni cuerpo que lo aguante
Y lo mejor siempre espera
Adelante

Y un día después de la tormenta
Cuando menos piensas sale el sol
De tanto sumar pierdes la cuenta
Porque uno y uno no siempre son dos
Cuando menos piensas sale el sol.
Cuando menos piensas sale el sol

Y un día después de la tormenta
Cuando menos piensas sale el sol
De tanto sumar pierdes la cuenta
Porque uno y uno no siempre son dos

Y un día después, y un día después
Sale el sol

Y un día después de la tormenta
Cuando menos piensas sale el sol
De tanto sumar pierdes la cuenta
Porque uno y uno no siempre son dos
Cuando menos piensas sale el sol.

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